A las 8:00, el desayuno
Si desayunas muy pronto no olvides tomar un tentempié unas 3 horas después y completar lo que has comido al levantarte. Entre el primer y el segundo desayuno combina fruta, lácteos y cereales.
A las 14:00, la comida
La mejor hora es entre las 13 y las 15 horas, ya que no debe pisarse ni con el tentempié de media mañana ni con la merienda. Debe incluir una ración de vegetales, así que puedes empezar con una ensalada; luego proteínas (preferiblemente las que te aportan las carnes blancas o el pescado) y no prescindas del postre. Evita platos muy proteicos (huevo frito y hamburguesa, por ejemplo).
A las 18:00, la merienda
Deben haber pasado unas dos horas como mínimo desde la comida para que no interfiera en el proceso de digestión de ésta. Se recomienda tomar leche o derivados, fruta..., pero en cantidades moderadas, ya que no se trata de anular el hambre para la cena (ni por tomar demasiada cantidad ni por hacerlo muy tarde).
A las 21:00, la cena
No la dejes para muy tarde, ya que deben transcurrir al menos dos horas entre que cenas y vas a dormir. De lo contrario, la digestión puede interferir en el descanso nocturno. Opta preferiblemente por los hidratos de carbono, que te ayudan a conciliar el sueño, y el pescado, blanco o azul, ya que sus proteínas son más fáciles de digerir que las de la carne. Si tienes hambre, antes de acostarte, tómate un vaso de leche o una infusión con 2 galletas integrales sin azúcar.
Si desayunas muy pronto no olvides tomar un tentempié unas 3 horas después y completar lo que has comido al levantarte. Entre el primer y el segundo desayuno combina fruta, lácteos y cereales.
A las 14:00, la comida
La mejor hora es entre las 13 y las 15 horas, ya que no debe pisarse ni con el tentempié de media mañana ni con la merienda. Debe incluir una ración de vegetales, así que puedes empezar con una ensalada; luego proteínas (preferiblemente las que te aportan las carnes blancas o el pescado) y no prescindas del postre. Evita platos muy proteicos (huevo frito y hamburguesa, por ejemplo).
A las 18:00, la merienda
Deben haber pasado unas dos horas como mínimo desde la comida para que no interfiera en el proceso de digestión de ésta. Se recomienda tomar leche o derivados, fruta..., pero en cantidades moderadas, ya que no se trata de anular el hambre para la cena (ni por tomar demasiada cantidad ni por hacerlo muy tarde).
A las 21:00, la cena
No la dejes para muy tarde, ya que deben transcurrir al menos dos horas entre que cenas y vas a dormir. De lo contrario, la digestión puede interferir en el descanso nocturno. Opta preferiblemente por los hidratos de carbono, que te ayudan a conciliar el sueño, y el pescado, blanco o azul, ya que sus proteínas son más fáciles de digerir que las de la carne. Si tienes hambre, antes de acostarte, tómate un vaso de leche o una infusión con 2 galletas integrales sin azúcar.
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